¡Más vale tarde que nunca! El filósofo Diógenes de Sínope soltó esta sentencia en el siglo IV a C. y… ¡Qué razón! Terminé mis estudios universitarios hace doce años y tras haber trabajado mucho tiempo en algo que no tenía nada que ver con ellos decidí volver a estudiar. En aquel momento no podía imaginar lo satisfactorio que sería para mí volver a “hincar los codos” GRACIAS a todo el equipo de profesores por hacernos disfrutar aprendiendo, por vuestro apoyo incondicional, por reconocer nuestro trabajo diario, por vuestra cercanía y comprensión. Y GRACIAS también a los compañeros que me he encontrado en este camino, ¡quién me diría que encontraría gente tan especial!